Ayer se cumplió el día del periodista en la Argentina

Quiero destacar a un hombre que con su dedicación me hizo amar el oficio de ser periodista aunque yo no lo soy mucha gente me confunde o en el día ayer me saludo con sus mensajes o sus mails.

La persona de quien hablo se llama Mariano Moreno y tenia muchas ideas las cuales si había sido envenenado el tenia intensiones de cambio de esta la Argentina que vivimos y que hoy en día es otra.

Porque cuando una persona piensa de diferente manera se lo persigue? o se lo discrimina con lo que hace o dice?

veo que otros trabajan en algún medio de comunicación se prostituyen (forma de decir) para hacer una nota, hacer un programa de televisión y recibir la bajada de línea de dueño del medio por un sueldo que muchas veces no va de acorde con su preparación académica o con su tiempo de elaboración que muchas veces lo corre la hora de cierre y comete varios errores.

A continuación algunas citas de Mariano Moreno:

El pueblo no debe contentarse con que sus jefes obren bien; él debe aspirar a que nunca puedan obrar mal. Seremos respetables a las naciones extranjeras, no por riquezas, que excitarán su codicia; no por el número de tropas, que en muchos años no podrán igualar las de Europa; lo seremos solamente cuando renazcan en nosotros las virtudes de un pueblo sobrio y laborioso

Quiero más una libertad peligrosa que una servidumbre tranquila.

Yo he visto llorar muchos hombres por la infamia con que se les entregaba; y yo mismo he llorado más que otro alguno, cuando a las tres de la tarde del 27 de junio de 1806, vi entrar a 1. 560 hombres ingleses, que apoderados de mi patria se alojaron en el fuerte y demás cuarteles de la ciudad

Es justo que los pueblos esperen todo bueno de sus dignos representantes; pero también es conveniente que aprendan por sí mismos lo que es debido a sus intereses y derechos.

La verdad, como la virtud, tienen en sí mismas su más incontestable apología; a fuerza de discutirlas y ventilarlas aparecen en todo su esplendor y brillo: si se oponen restricciones al discurso, vegetará el espíritu como la materia; y el error, la mentira, la preocupación, el fanatismo y el embrutecimiento, harán la divisa de los pueblos, y causarán para siempre su abatimiento, su ruina y su miseria.